¡Alumnos destacados!

Forman parte de nuestra historia

¡Nuestros alumnos destacados, parte de nuestra historia! Con gratitud y cariño, agradecemos a estas personas y sus familias por su tiempo, fidelidad y confianza. Desde que eran niños hasta convertirse en adultos con el máximo nivel en inglés, hemos sido testigos de su crecimiento y éxito. Son un ejemplo inspirador para todos. 


Te invitamos a descubrir sus historias y fotos, y a ser parte de esta comunidad de aprendizaje.

Paula Vacas

Alumna de Teb Triana

En mi casa el inglés ha sido siempre muy importante. Mi madre es profesora de inglés y desde bebé me contaba cuentos en inglés y me enseñaba las letras y algunas palabras para que se me fuera haciendo el oído. Me apuntó a la academia con 3 años; por la mañana iba a la guardería y por la tarde al inglés.

Yo recuerdo que las clases eran en la guardería los Angelitos, con la “teacher Karen”. Me acuerdo perfectamente de cómo nos enseñaba las preposiciones con un acerico en forma de tomate y nos decía “the tomato is on the box…” Siempre me ha gustado ir a la academia porque aprendía inglés jugando y me lo pasaba genial.

Con 14 años aprobé el B1 y dos años más tarde el B2. Esto me ayudó muchísimo a la hora de estudiar inglés en el colegio y, además me dio la oportunidad de leer libros en inglés. En el verano de 4ºESO me leí los libros de Harry Potter en inglés y decidí que quería saber más y hacer el C1. En primero de bachillerato lo aprobé. Este examen fue mucho más difícil que los anteriores y me supuso un gran esfuerzo, pero mereció la pena. Pensé en dejar el inglés ahí y estuve un año sin ir a la academia, y me di cuenta de que lo echaba de menos.

Después de estar toda la vida yendo a la academia por la tarde, se me hacía raro no ir. Además, a mí me gusta terminar las cosas hasta el final, por eso, al año siguiente decidí retomar el inglés e ir a por el C2. Jamás me he leído unos textos más rebuscados que los de ese examen, nunca he tenido que escribir tantos “essays” y echarle tanta imaginación al examen oral y nunca he hecho tantos ejercicios de “use of English”.

Es cierto que el examen es muy duro y exige mucho estudio además de las clases de la academia, pero merece la pena. En las clases del C2 con Kelly y Rob aprendí muchísimo. Aunque eran super intensas y acababa agotada, me lo pasaba muy bien. Hicimos hasta un “club de lectura” en el que nos leímos dos libros para comentarlos en clase. Yo creo que las clases del C2 son las que más he disfrutado porque suponían un reto cada día. Tener un buen nivel de inglés me ha abierto muchas puertas a nivel académico.

En el colegio nunca me ha supuesto un problema el inglés y en la universidad, he obtenido créditos sólo por el idioma. Además, yo que estudio medicina, necesito saber inglés porque la mayoría de los artículos científicos y libros que tengo que leer están en inglés, que es el idioma de la ciencia. 

Laura García

Alumno de Teb Espartinas

Yo empecé a venir a la academia cuando tenía tan solo 6 años, ya que mis padres decidieron que debía empezar a aprender un idioma, y no puedo estar más agradecida con esta decisión.


Desde que era pequeñita disfrutaba viniendo a la academia porque era una forma de aprender algo que me iba a ser muy útil en la vida mientras me lo pasaba super bien y hacía un montón de amigos nuevos.


Recuerdo que un día, cuando estaba en primaria aún, le dije a mi madre: “mamá mamá ya mismo voy a saber más inglés que el teacher del colegio”, y ella me miró un poco con cara de loca. Y bueno, algunos años después ya conseguí sacarme mi primer título y dije que hasta que no acabara con todos no me iba de la academia. Pues aquí sigo, 14 años después desde que la pisé por primera vez :))


A nivel académico, llegar a un nivel avanzado de inglés me ha ayudado mucho de cara a poder conseguir ir de intercambios mientras estaba en el instituto y poder comunicarme fuera de España sin problemas y ahora que estoy en la universidad puedo optar a becas Erasmus y además me dan algunos créditos.


En esta academia siempre me ha llamado mucho la atención la familiaridad que se respira. Desde el primer momento nos tratan super bien y el ambiente, tanto en clase como fuera, es excelente. Algo que me hace mucha ilusión es seguir en contacto con algunas profesoras que me dieron clase hace varios años!! 

También me parecen super originales las fiestas de Halloween y Easter durante el curso y los campamentos de verano, ¡fueron inolvidables!

Javier Llorente

Alumno de Teb Espartinas

Yo empecé en la academia con 7 años, al poco de haber abierto en Espartinas. Al igual que todos los niños cuando son tan pequeños, ninguno quiere ir a clases por las tardes cuando podría estar jugando con sus amigos en el parque. Así que, aunque empecé las clases sin muchas ganas, pronto cambió al ver el ambiente de la clase. Desde las clases de los más pequeños a la de los niveles más altos, todas las lecciones han sido muy entretenidas y muchas veces me han servido para desconectar de la rutina y pasar un buen rato con mis compañeros.

Gracias a estar desde pequeño aprendiendo inglés no me ha sido muy difícil ir avanzando por los diferentes certificados de Cambridge. Siempre que aprobaba un examen oficial pensaba: “Venga, a por el siguiente, que no está tan lejos” y así fuí superándolos hasta llegar al C2, que con suerte aprobaré este año.

Estoy muy agradecido de que mis padres me apuntaran a la academia ya que me ha facilitado mucho la vida a lo largo del tiempo. Una de las cosas más importantes ha sido facilitarme los estudios de la ESO, Bachillerato y universidad. No tener que preocuparte de una asignatura en Bachillerato y en la EVAU definitivamente me ayudó a no sentirme tan estresado cuando estudiaba y por supuesto mejoró mi media a la hora de acceder a la universidad. También, gracias a tener el C1, he podido conseguir créditos extra en mi grado, haciendo que no tenga que cursar tantas asignaturas como alguien que no las tenga. Por último, he de decir que la hora de buscar trabajo y no tener experiencia, el inglés ha sido una de las cosas que más ha destacado en mi currículum.

José Miguel Vilches

Alumno de Teb Triana

Cuando tenía unos 7 años, mi madre me quiso apuntar a la academia. Aunque ahora me alegro de que lo hiciera, entonces no me gustaba la idea de dar más clases después del colegio. Al final me acabaron convenciendo y, como mis primos ya estaban apuntados, no me pareció tan mal.

Cuando llegué el primer año, no conocía a nadie. Rob fue mi primer profesor y se encargó de que todos nos presentáramos y acabáramos conociéndonos. Lo que me gustaba de las clases es que no se enseñaba como el inglés del colegio. Para mi las clases eran divertidas porque hacíamos muchos juegos y actividades.

Nunca hubiera imaginado que acabaría obteniendo el título de C2 en inglés. Sin embargo, a medida que avanzaron los años mis profesores me animaron para que fuera obteniendo los distintos títulos en función de mi nivel. En 1º de Bachillerato obtuve el C1 y, tras un par de años que me tomé de descanso para preparar selectividad, empezar la carrera, etc., decidí que quería terminar sacándome el C2.

Tener estos títulos me ha permitido quitarme alguna asignatura de la carrera, mayor calificación en algunas becas/Erasmus, y seguramente suponga una ventaja en mi futuro laboral. Pero, más que el título en sí, la habilidad de comunicar y comprender en inglés es fundamental en mi día a día. Tengo muchos amigos de otros países con los que hablo en inglés, proyectos en los que participo, puedo comprender artículos científicos, etc.

En definitiva, es sorprendente que algo que al principio me parecía aburrido me haya acabado gustando tanto y dando tantas oportunidades.

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